Cuando se habla de invertir en oro se puede estar hablando de muchas cosas distintas: podemos hablar de comprarlo de forma física (lingotes, monedas o joyas), mediante certificados de depósito, futuros de oro, acciones de empresas mineras, fondos de inversión y fondos cotizados.

En los Estados de la Unión, el oro de inversión se encuentra regulado por la Directiva 1998/80/CE del Consejo, de 12 de octubre de 1998, que declaró exentas de IVA las entregas de oro de inversión al objeto de favorecer su uso como instrumento financiero.

Esta directiva se traspuso en la Ley 37/92 del IVA en España. Esta registra las particularidades del Oro de Inversión en el artículo 14 del Capítulo V en su título IX y a través de la Ley Ley 55/1999 BOE de 30 de diciembre de 1999.

Eso sí, hay que aclarar que para estar exento del pago del impuesto la inversión en oro tiene que cumplir una serie de requisitos que lo transformen en oro de inversión a todos los efectos.

Así para la AEAT solo es oro de inversión:

◾ Los lingotes o láminas de oro de ley igual o superior a 995 milésimas y cuyo peso se ajuste a lo dispuesto en el apartado noveno del anexo de la Ley.

◾ Las monedas de oro que reúnan los siguientes requisitos:

  • Que sean de ley igual o superior a 900 milésimas;
  • Que hayan sido acuñadas con posterioridad al año 1800;
  • Que sean o hayan sido moneda de curso legal en su país de origen
  • Que sean comercializadas habitualmente por un precio no superior en un 80% al valor de mercado del oro contenido en ellas

Se entiende que estos requisitos se cumplen, y por tanto se consideran oro de inversión, las monedas de oro incluidas en la relación que se publique en el “Diario Oficial de la Unión Europea” antes del 1 de diciembre de cada año, válida para el año siguiente y para los sucesivos en tanto no se modifiquen las publicadas.

Listado de monedas de oro aprobadas

En resumen, las entregas, adquisiciones intracomunitarias e importaciones de oro de inversión están exentas del impuesto sobre el valor añadido en los Estados miembros.

Invertir en oro es benéfico ya que sirve de apoyo en época de incertidumbre política o económica, ayuda en el largo y corto plazo, es una herramienta que protege contra la inflación y contra la devaluación, no es corrosivo, y es aceptado en cualquier parte del mundo.

El oro no se devalúa fácilmente como sucede con el dinero, ya que el valor de este metal precioso se determina con base en la ley de la oferta y la demanda.

El oro se distribuye de la siguiente manera: 60% de la demanda anual de oro en todo el mundo proviene de la industria joyera, 10% a la tecnológica, 20% se destina a lingotes y monedas de inversión, y 10% a los bancos centrales del mundo.

Un aspecto que hay que tomar en cuenta es que cuando se adquiere de manera física tiene costos adicionales por mantenimiento, transporte, almacenaje y seguridad. Y cuando se hace mediante certificados, únicamente se adquiere un documento que demuestra que la persona es propietaria de una cantidad específica.

El otro aspecto importante es el de la seguridad a la hora de almacenarlo: siempre debe estar cubierto por un seguro ante el peligro de un posible robo tanto si lo guardas en casa como si acudes a un servicio de custodia.

Comprar oro físico de inversión es una idea inteligente en los tiempos que corren.